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Consejos para viajar en coche por Europa sin gastar una fortuna
Si estás planeando viajar en coche por Europa, estás a punto de embarcarte en una experiencia inolvidable. Pero, ¿quién dijo que tener una gran experiencia debe costar una fortuna? Aquí tienes algunos consejos para recorrer el viejo continente en cuatro ruedas sin que tu bolsillo se resienta más de la cuenta.
Antes de comenzar tu viaje en coche por Europa, traza un itinerario detallado. Esto no solo te ayudará a optimizar tu ruta y tiempo, sino también a evitar gastos innecesarios en combustible y peajes.
El gasto en combustible puede ser uno de los mayores desafíos al viajar en coche por Europa. Investiga los precios de la gasolina en diferentes países y reposta en las estaciones más económicas.
Para llevar a cabo la planificación, puedes usar aplicaciones como Via Michelin, de la que ya te hemos hablado en anteriores ocasiones, y que te permite calcular los costes de tu ruta en coche, teniendo en cuenta los peajes, el coste del combustible e incluso el precio de los hoteles y hospedajes que te encontrarás por el camino.
Por otro lado, puedes optar por países y regiones que sean conocidos por ser más económicos en términos de alojamiento, comidas y atracciones. Europa tiene una gran diversidad de lugares para explorar, así que investiga cuáles son los destinos más amigables con tu presupuesto.
Europa ofrece una variedad de opciones de alojamiento económico, desde hostales hasta campings. ¡Explora diferentes alternativas para descansar sin gastar demasiado! Asegúrate de que los lugares donde te hospedes estén ubicados estratégicamente en tu ruta.
Y, si los espacios pequeños nunca han sido un problema para ti, también puedes optar por camperizar tu coche.
Si tu ruta en coche pasa por España, Portugal, Francia e Italia, no puedes olvidarte de tu VIA-T de Pagatelia, el único interoperable en estos cuatro países (en Italia, solo para vehículos ligeros).
Ahorrarás tiempo y combustible durante tu trayecto al eludir los atascos que a menudo surgen en las casetas de peaje, donde se forman largas filas en los carriles destinados a pagos con tarjeta o efectivo. No será necesario que hagas paradas para pagar: es suficiente con reducir la velocidad a 30 km/h.
También evitarás la necesidad de manejar monedas o billetes en las estaciones de peaje, y tampoco tendrás que lidiar con las diferencias en el funcionamiento de las máquinas de pago o con la barrera del idioma. De este modo, puedes viajar con menos preocupaciones y ahorrar dinero con los descuentos disponibles en las autopistas españolas.
Cuando te embarcas en un emocionante viaje en coche por Europa, la última cosa que deseas es encontrarte con multas inesperadas que puedan arruinar tu experiencia y aumentar tus gastos. Por ello, es crucial conocer y comprender las normativas de tráfico y los límites de velocidad de los diferentes países que vas a visitar.
Recuerda también que algunas ciudades europeas tienen zonas de bajas emisiones. Conocer estas zonas te ayudará a evitar multas por entrar sin permiso.
Antes de comenzar tu viaje, asegúrate de que tu coche esté en óptimas condiciones. Realiza un mantenimiento preventivo y verifica neumáticos, frenos y fluidos para evitar gastos inesperados en reparaciones mientras viajas en coche por Europa. Imagina que se avería el coche en un país conocido por su alto coste de vida, como Suiza, ¡vaya faena!
Asegúrate de llevar contigo todos los documentos necesarios, como el carné de conducir, el DNI, la tarjeta de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV), los documentos del vehículo y del seguro. Algunos países pueden requerir documentación adicional, como un distintivo o viñeta de autopista o una pegatina de emisiones.
Si piensas viajar por alguno de los 27 países de la Unión Europea o el Espacio Económico Europeo (Islandia, Liechtenstein y Noruega) no es necesario ningún permiso de conducir especial ni solicitar la ‘carta verde’ a tu compañía de seguros. Tampoco si vas a conducir en tus vacaciones por Andorra, Reino Unido y Suiza, ya que España ha firmado un acuerdo con estos países.
Si quieres ahorrar al máximo y estás en un país con un coste de vida alto, cambia los restaurantes por los supermercados. No tienes que renunciar a comer caliente: muchos hoteles tienen microondas a disposición de sus huéspedes y, en caso contrario, siempre puedes hacerte con una fiambrera eléctrica.
Con estos consejos, estás listo para emprender un viaje low-cost, pero lleno de momentos inolvidables. Así que, ¡prepárate para recorrer las carreteras europeas y disfrutar de todo lo que este fascinante continente tiene para ofrecer!
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